Powered By Blogger

Páginas

jueves, 15 de diciembre de 2011

Escenarios y actores en 2012

En 2011 todos los acontecimientos políticos importantes fueron vinculados con los posibles escenarios de la sucesión presidencial. En particular, las elecciones locales fueron vistas como laboratorios de lo que acontecería el próximo año.
La atmósfera política perfiló diferentes posibilidades, pues si bien el PRI se hizo de cuatro gubernaturas, el PRD se afianzó en Guerrero y el PAN ganó en Baja California Sur.
No obstante, el ambiente político está enrarecido por la presencia del crimen organizado en los comicios. Cada vez es más claro que es un actor a tomar en cuenta, al menos en los contextos locales. El problema es que llegue a contaminar una elección nacional, con lo que se estaría ante una situación muy peligrosa y descontrolada, que pondría en jaque a todas las instituciones políticas del país.
Por lo pronto, los partidos políticos adelantaron su proceso interno y hoy, antes de que inicien los tiempos formales de las precampañas, tanto la izquierda como el PRI han definido a quién será su candidato. Ante la decisión de que Andrés Manuel López Obrador fuese el candidato de la izquierda, el PRI también hizo lo propio al quedarse solo en la carrera Enrique Peña Nieto. En cuanto al PAN, aunque las cosas no están definidas del todo, los tres aspirantes se encuentran dedicados a promoverse como si ya estuviesen en el proceso de selección del candidato.
Por ahora es difícil hacer un pronóstico, pero hacia el próximo año ya es posible prefigurar al menos tres escenarios en torno a la elección presidencial. Desde luego, en este momento no sería sino una mera especulación, pero que se sostiene a partir de los resultados electorales de 2011, de las encuestas (muchas de ellas a petición de parte) y de las expectativas que se vienen generando con los que serán los candidatos.
El primer escenario es que se repita lo sucedido en el Estado de México, en donde el candidato del PRI superó con una gran diferencia a los otros dos aspirantes. Si en julio del próximo año se sigue manteniendo la ventaja que lleva Peña Nieto en las encuestas, este contexto será altamente factible y tanto las izquierda como el PAN se quedarían peleando un lejano segundo lugar. Como las posibilidades de que hubiese una alianza entre el PAN y el PRD quedaron enterradas, que esta situación se pudiese presentar no es del todo descartable.
Sin embargo, el proceso en el estado del ahora abanderado del PRI no tiene por qué repetirse ni sostenerse en otras entidades. Si bien es un candidato conocido, tendrá todavía que hacer una campaña para difundir sus propuestas, pues los electores no se van a conformar solamente con su campaña mediática y la promoción de su imagen. Por lo pronto, habrá que ver qué tanto sostiene su ventaja en las encuestas, al menos hasta que inicien formalmente las campañas.
Un segundo escenario es que uno de los candidatos opositores a Peña Nieto rebase con mucho al otro y que la elección se polarice entre dos fuerzas políticas. Esta posibilidad dependerá de que López Obrador se recupere y deje atrás su imagen negativa o de que el candidato panista remonte la mala imagen que han dejado las gestiones de los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón.
Un tercer y último escenario es que la contienda, como recientemente sucedió en Michoacán, se presente en tercios, en donde ninguno de ellos obtenga amplia mayoría y se termine con un final de fotografía. Esto implicaría que cada uno de los candidatos se fortaleciera en algunas regiones del país y tuviera por lo tanto capacidad competitiva. Si consideramos que las tres fuerzas políticas pueden construir diferentes bastiones en el país, la eventualidad de los tercios podría hacerse realidad.
Cualquiera de estas posibilidades tiene sustento en la realidad política, mucho de ello debido a la poca memoria política de los ciudadanos, los cuales se encuentran deseosos de cualquier expectativa que pueda remontar la negativa situación en la que se encuentra el país.
Empero, cualquiera de los escenarios que prevalezca va a propiciar una difícil situación para la gobernabilidad del país. Por las experiencias recientes, las elecciones no parece que puedan resultar del todo pulcras y el manejo de recursos públicos para la compra del voto todavía es una práctica difícil de retraer y disminuir. Parece que cualquiera que sea el candidato triunfador, tendrá que remar contra la corriente de la falta de legitimidad. Es una situación indeseable pero muy próxima a presentarse nuevamente.

Entradas populares

 
Copyright 2009 Critica de un pais. Powered by Blogger
Blogger Templates created by Deluxe Templates
Wordpress by Wpthemesfree